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¿Cuáles solas 9 fobias sexuales más recurrentes en la actualidad?

¿Sabías que las fobias están relacionadas a prácticamente cualquier cosa, incluso los aspectos sexuales de la naturaleza humana? Pues la verdad es que sí, en el mundo de los miedos irracionales hay una larga lista que no está precisamente ligada a objetos o ambientes.

Las fobias sexuales son un tipo de miedo poco tomado en cuenta en la mayoría de las conversaciones y temas al respecto, ya que, por lo general, en ciertos espacios se sigue manteniendo un fuerte y marcado tabú sobre lo que implica el sexo y las relaciones íntimas.

Si no sabías que existían, crees que las padeces o has oído hablar algo de ellas, pero buscas profundizar un poco más, en las siguientes líneas te voy a explicar por qué se generan y te hablaré en detalle sobre las 9 fobias referentes al sexo más habituales hoy en día.

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Índice de contenidos📚:

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¿Por qué surgen los miedos sexuales?

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Antes de empezar a hablarte sobre las fobias relacionadas al sexo más habituales o frecuentes que hay hoy en día, es importante primero entender qué son estos miedos y principalmente cuáles son los detonantes que los generan, para así poder analizar mejor a cada uno y, dado el caso, lograr prevenirlos.

Y es que, aunque todas tienen bastantes diferencias en cuanto a sus características y forma de expresión, por lo general, la mayoría de estas fobias tienen orígenes bastante parecidos, con ciertas excepciones en casos aislados.

Al ser de tema sexual, no debe extrañarte que las causas principales estén relacionadas justamente al desarrollo y a conductas, experiencias o aspectos variados siempre en el mismo ámbito de las relaciones íntimas. Pero, aunque suene simple, hay varias cosas que explicar sobre lo que causa las distintas fobias sexuales que existen, por ello, a continuación te dejo una lista de los detonantes más frecuentes:

Haber tenido experiencias poco satisfactorias en el pasado

El miedo relacionado con el sexo y las relaciones no es algo que se desarrolle únicamente en quienes nunca han vivido esta experiencia. Todos nosotros podemos tener, en algún punto de la vida, un miedo como este, principalmente si se asocia a detonantes como el haber tenido experiencias poco satisfactorias.

En este asunto del sexo hay muchas cosas que pueden salir mal, ejemplo, embarazos no deseados, enfermedades, o situaciones variadas, que en ciertos casos se vuelven un detonante.

Traumas relacionados a la violencia sexual

Sin duda, la causa o detonante más triste y justificado de todos y a la vez del que nadie se siente cómodo de hablar. Tener experiencias traumáticas como las violaciones, agresión sexual, abortos o demás, sin duda alguna es motivo para crear miedos profundos que muy fácilmente se transforman en una fobia intensa que requiere tratamiento.

Crecer sin una correcta educación sexual

Anteriormente se creía que los niños y jóvenes no debían aprender nada sobre el sexo, por lo que desde pequeños se buscaba evitar a toda costa este tema. Con el tiempo, la educación sexual fue cobrando importancia, pero aún hay quienes se niegan a ella y la consideran como algo innecesario en el desarrollo de los niños o adolescentes.

Pero el problema es que crecer con ideas equivocadas sobre el sexo o haberlo visto como algo realmente muy malo a lo largo de todo tu crecimiento puede detonar en la edad adulta una fuerte fobia a las relaciones sexuales, sea general o a algún aspecto especifico de las mismas.

Las fobias sexuales que se presentan más a menudo en la actualidad

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Aunque al escuchar el nombre solo se nos ocurra una o dos opciones, consideradas como las más obvias, realmente los miedos que pueden entrar en esta categoría son bastantes, al punto de que hay quienes aseguran que en total existen más de 20 o 30 miedos sexuales o relacionados al sexo.

Aunque son demasiadas, solo unas cuantas se las toma como un verdadero asunto de preocupación debido a la frecuencia con la que aparecen, en cambio el resto son consideradas como poco comunes o no habituales, ya que solo afectan en casos muy particulares o incluso son variaciones leves de las comunes.

Si bien para darte más detalles se podría hacer una lista mucho más completa, la verdad es que solo es necesario conocer unas pocas, por lo que a continuación te dejo la lista de las 9 más frecuentes, siendo estas justamente las que debes tener en cuenta:

Vaginismo

Entre todas, el vaginismo es quizá la más conocida de todas y, por ende, la primera a mencionar. En sí, afecta a las mujeres y consiste en un miedo profundo a la penetración debido a la creencia de que causará dolor, malestar o incluso desgarre. Quienes la padecen, tienen problemas a la hora de tener relaciones ya que involuntariamente contraen los músculos vaginales para evitar la penetración.

Pero, además de esto, también afecta en otros aspectos, por ejemplo, puedes huirle a la idea de usar tampones en tu periodo menstrual o incluso rechazar las consultas ginecológicas.

Falofobia

Se trata de una fobia mucho más común en mujeres pero que en algunos casos bastante peculiares puede afectar a personas del sexo masculino. La falofobia, como lo sugiere su nombre, se trata de un miedo desmedido hacia los penes principalmente en estado erecto.

La falofobia afecta la conciliación de las relaciones sexuales, pero más de allá de esto puede ser prácticamente indetectable y quien la presenta puede llevar una vida totalmente normal.

Genofobia

En sí, de todos los miedos relacionados con el sexo, este es el más conocido y habitual, aunque uno de los que cuesta más identificar, ya que se trata justamente de la fobia a tener relaciones sexuales.

Quienes viven con este miedo, no es que no sientan deseos de tener sexo, sino que en el momento previo a la consumación se bloquean, entran en pánico o sienten una fuerte repulsión, lo que termina afectando su autoestima y la relación con su pareja.

Erotofobia

Aunque para la mayoría de las personas en la actualidad tocar temas sobre el sexo si bien no es lo más sencillo, ya no es visto como algo malo, lamentablemente en ciertas culturas hablar sobre esto es algo más que delicado. Esta fobia es algo muy parecido y se podría decir que es justo allí en dónde se origina.

La erotofobia es el miedo o desprecio a hablar sobre sexo, sin importar si el tema se va a tocar con adolescentes o con personas ya adultas en quienes debería ser algo normal.

Gimnofobia

La gimnofobia es la manera formal de llamar al miedo a estar desnudo o a la desnudez en general, una fobia que, si bien no está relacionada directamente a un miedo al sexo, sí tiene una conexión de cierta forma profunda.

Al igual que la anterior, esta clase de fobias puede tener un origen relacionado a la forma en la que has sido criado, ya que a muchos desde pequeños se les enseña que exponer su cuerpo es algo muy malo.

Agrafobia

El sexto miedo de nuestra lista de fobias es un padecimiento que suele afectar principalmente a las personas que han sido víctimas de agresión sexual o que han vivido de cerca una situación similar, aunque no haya sido en primera persona y se trata justamente de la fobia a ser víctima de un abuso sexual.

Aunque de por sí la idea es bastante aterradora y a todos o casi todos les daría miedo tener que vivir una experiencia así, quienes presentan este tipo de fobia al sexo llevan el pánico mucho más lejos hasta el punto de tener dificultad para mantener relaciones con su pareja por la idea de que el acto será muy similar a una violación.

Androfobia

Es un rechazo o fobia bastante peculiar debido a que se trata de un miedo a los hombres. En sí, no tiene nada que ver con un detalle particular del sexo masculino, como su apariencia, comportamiento, o lo que puede o no realizar, sino a las personas de este género en general.

Es padecida principalmente por mujeres, aunque en ciertas ocasiones llega a presentarse en hombres, y en cualquiera de los casos crea un fuerte conflicto que impide no solo relacionarte o encontrar pareja, sino también desenvolverte en la sociedad.

Venustrafobia

En el lado opuesto a la anterior encontramos la venustrafobia o miedo a las mujeres, aunque en este caso sí es un poco más específico, ya que se trata de fobia a las mujeres que según los criterios personales se pueden considerar hermosas.

Es más común en hombres, pero también la viven muchísimas mujeres y trae exactamente las mismas complicaciones que la anterior.

Cipridofobia

Para cerrar, hay que mencionar la fobia a las enfermedades sexuales, o más específicamente el miedo a contraer enfermedades venéreas. Como es de esperar, cuando aparece esta fobia, la conducta sexual del paciente cambia a totalidad, ya que puede empezar a negarse rotundamente a estar con su pareja aunque sepa que esta no padece de enfermedades, o incluso insinuar que hay que protegerse en caso de que exista una infidelidad.

¿Crees tener alguna de ellas? Si es así, puede que tu vida sexual se esté viendo afectada, por ello te invito a buscar apoyo y verás cómo, con tranquilidad, todo puede volver a ser como a antes si así te lo propones.