Depresión y neurotransmisores. Conoce la bioquímica de este trastorno.
¿Cómo de importantes son los neurotransmisores en la depresión? ¿Es posible que pueda modificarlos de forma natural sin recurrir a fármacos?
Las respuestas a las anteriores preguntas son: Mucho y Sí. Y en este post te voy a mostrar cómo puedes lograr eso.
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Índice de Contenidos 📚:
- ¿Qué neurotransmisores actúan en el cerebro de una persona con depresión?
- Serotonina y depresión
- Depresión y dopamina
- Neurotransmisor noradrenalina en el trastorno de depresión
- Fallos en la bioquímica del cerebro de una persona con trastorno depresivo
- ¿Qué objetivos tienen los fármacos con los neurotransmisores y la depresión?
- La depresión y las monoaminas
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¿Qué neurotransmisores actúan en el cerebro de una persona con depresión?
La química de los sistemas nerviosos que componen los cuerpos humanos no es algo que se pueda resumir en un breve post, pero lo que sí podemos hacer es conocer las bases principales, los funcionamientos más importantes con neurotransmisores que están contribuyendo al trastorno depresivo.
Serotonina y depresión
La serotonina es un neurotransmisor que regula el sueño, el estado de ánimo, el deseo sexual e incluso el apetito.
Además es vital para la producción de la hormona melatonina, aquella que nos hace conciliar el sueño por las noches.
Lo que ocurre cuando una persona sufre de depresión es que el neurotransmisor serotonina se produce en menores cantidades, lo que provoca ese estado de ánimo depresivo.
Pero no solamente eso, también afecta a la calidad del sueño, apetito y deseo sexual, pues, como hemos visto, la serotonina juega un papel importante en todas ellas.
Aumentar la serotonina de forma natural
Antes de ver qué medicamentos pueden ayudarnos a reestablecer niveles óptimos de este neurotransmisor, como siempre, tienes una gran cantidad de medidas que puedes comenzar a tomar de forma totalmente natural (y gratuita, en muchas ocasiones).
¿Cómo puedes hacerlo?
- Mantén un ciclo de sueño predecible: es importante tener un horario establecido en el que el cuerpo se acostumbre a conciliar el sueño y despertarse. No te ayudará nada estar levantándote y acostándote cada día a una hora diferente, ya sea fin de semana o entre semana.
- Toma el sol: la vitamina D producida gracias a tomar el sol es precursora de la serotonina. Pero no solamente eso, sino que hacer que la luz durante el día entre por nuestros ojos permite a nuestro organismo ajustar los ciclos circadianos.
De ese modo, sabe mejor cuando es de día y debes tener energía para llevar a cabo las diversas tareas de la jornada y cuándo es de noche y el cuerpo debe dormir profunda y reparadoramente.
Uno de los problemas en el mundo moderno es que muchas personas, especialmente las que trabajan en entornos de oficinas, no toman los suficiente el sol, de modo que en muchas ocasiones se genera una deficiencia de vitamina D y de serotonina.
Pero no solamente eso, ya que, debido a que la luz en el ambiente de oficina no varía del mismo modo que lo hace la intensidad del sol a lo largo de todo el día, el cuerpo no sabe muy bien en qué hora se encuentra, ni qué hacer en ese momento concreto.
Es especialmente importante eliminar la luz azul de los aparatos electrónicos, puesto que impiden la adecuada generación de melatonina, dañando así la calidad del sueño.
- Realizando actividades que te gusten: si quieres sentirte bien, haz más de lo que te haga sentir bien y menos de lo que te haga sentir mal. Así de simple. Claro que a veces no puedes estar todo el día realizando esas actividades, pero siempre puedes dedicar los ratos libres a ellas, en lugar de entretenerte con alguna otra cuestión.
Es muy importante que distingamos entre lo que nos aporta paz y serenidad frente a lo que simplemente nos produce placer. Lo que estás buscando es lo primero, que podrías lograr, por ejemplo, dando un paseo, pero no comiéndote un donuts. ¿Ves por dónde voy verdad?
- Alimentación: el triptófano es el principal aminoácido que el cuerpo utiliza para producir serotonina, de modo que una dieta en alimentos ricos en esta sustancia te será realmente beneficiosa. Algunos alimentos ricos en triptófano son el chocolate (¡puro eh!) y el plátano.
- Medita: practicar técnicas de relajación y de meditación puede ayudarte también a aumentar los niveles de serotonina y así brindarte una profunda paz.
Medicamentos para el déficit de serotonina
Lo primero que debe quedar clarísimo es que si deseas mejorar la depresión a través de fármacos que mejoren tus niveles de serotonina, debes siempre hacerlo por prescripción médica.
Aunque los mecanismos concretos todavía no están del todo claros, en la actualidad los fármacos para mejorar la serotonina y depresión más utilizados son los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina (ISRS).
Para explicarlo de un modo realmente sencillo y que quizás enfadaría a algún profesional, diremos que los recaptadores de serotonina son los encargados de volver a «guardar» la serotonina, acabando así con sus efectos beneficiosos.
Los inhibidores de la recaptación no producen más serotonina (como una dieta más rica en triptófano, por ejemplo), sino que lo que hacen es impedir que la serotonina sea «guardada» de nuevo.
El antidepresivo más popular que impide que la serotonina abandone nuestro cerebro (y se mantenga en unos niveles altos) es la fluoxentina.
Algunos apuntes sobre la serotonina y depresión
Aunque no cabe duda de que mejorar los niveles de serotonina será de utilidad para combatir un trastorno depresivo, siempre debes recordar que la depresión no solamente esta provocada por un único factor, sino que se trata un cúmulo de cosas.
Siempre intenta encontrar qué otros motivos pueden estar generando el bajo estado de ánimo, de modo que puedas solucionar todas las causas desde la propia raíz.
Depresión y dopamina
La dopamina es el neurotransmisor de la motivación, de la anticipación de un premio, de un placer. Cuando alguna vez has recordado que más tarde ibas a hacer algo muy placentero, divertido o excitante, la motivación tiene como causa la liberación de dopamina.
La dopamina, por lo tanto, no está tan relacionada con la depresión (aunque es cierto que un déficit de la misma también puede contribuir) como la serotonina. Además abusar de la generación de dopamina puede generar adicciones.
En el caso de las personas que consumen drogas, por ejemplo, ocurre que cada vez «necesitan» una dosis mayor de dopamina, y la consiguen gracias a consumir una dosis mayor de la sustancia que les está ayudando a producirla.
Pero no hace falta que nos vayamos a esas situaciones; las personas también pueden volverse adictas a ver series en Netflix o a consumir Redes Sociales, pues también son potentes generadores de dopamina. Y no es casualidad que lo sean, por supuesto.
Neurotransmisor noradrenalina en la depresión
Investigadores en el Instituto de Biomedicina y Biotecnología (Ibbitec) de Cantabria han descubierto también el efecto de la depresión sobre la noradrenalina o norepinefrina, y han podido comprobar que la enfermedad depresiva genera una alteración del funcionamiento de las células cerebrales (no solamente una alteración en los neurotransmisores).
Según las investigaciones, la depresión provoca que aumenten en número las proteínas sobre las que actúa la noradrenalina, pero también disminuiría la capacidad que estas proteínas tendrían para generar reacciones químicas.
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Funciones principales de la norepinefrina
Dentro de las funciones que este neurotransmisor relacionado con la depresión tiene podemos mencionar las siguientes:
- Efectos sobre la presión arterial.
- Interviene en las situaciones estresantes como en las que el sujeto se encuentra en una situación de peligro.
- Influye en la frecuencia cardiaca.
- Influye en la contracción muscular involuntaria (en los casos de depresión ansiosa, muchas veces suele haber un exceso de contracción en los músculos de la espala y de la zona cervical, lo que genera desagradables molestias).
- Es capaz de contribuir en el aumento de los niveles de oxígeno cerebral.
Fallos en la bioquímica del cerebro de una persona con trastorno depresivo
Fallo en los receptores de serotonina
Una alteración relacionada con los neurotransmisores en personas que se encuentran deprimidas es la relacionada con los receptores de serotonina.
Los receptores de serotonina regulan la liberación de una gran cantidad de neurotransmisores, entre los que se encuentran el glutamato, GABA, adrenalina y noradrenalina, dopamina…
Un fallo en ellos puede causar trastornos del estado del ánimo, del apetito, de sueño, la memoria, el aprendizaje…
Falta de factores neutróficos
Los factores neutróficos son compuestos químicos que participan directamente en la supervivencia de los tejidos neuronales como los de las neuronas, en incluso en la de tejidos no nerviosos.
Un mal funcionamiento de éstos puede provocar que no se lleve a cabo un adecuado cuidado de células como las neuronas y células gliales, tan importantes en el desempeño mental y emocional.
¿Qué objetivo tienen los fármacos con los neurotransmisores y la depresión?
El objetivo principal ya sabemos que es mejorar o eliminar el trastorno depresivo, pero las vías que los diferentes tipos de antidepresivos utilizan (sus objetivos específicos para lograr el objetivo principal) son variados.
Inhibidores selectivos de la Recaptación de Serotonina (ISRS)
Sin duda uno de los más conocidos, y que ya te he mencionado antes en el post brevemente. Funcionan impidiendo la recogida de serotonina, favoreciendo que ésta permanezca por más tiempo.
Se trata de antidepresivos que generalmente causan menos efectos secundarios y que tienen menor probabilidad de causar problemas a dosis más altas que otros antidepresivos.
Inhibidores de la recaptación de serotonina y norepinefrina
Parecidos a los anteriores, pero con la particularidad de que ahora también se inhibe la recaptación de norepinefrina o noradrenalina.
Inhibidores de la monoaminoxidasa
Este tipo de fármacos antidepresivos son realmente delicados, debido que incluso la interacción con ciertos alimentos puede resultar mortal.
Es por ello que se requiere una dieta realmente estricta y controlada, con el fin de evitar cualquier tipo de efecto secundario, así como eliminar ciertos medicamentos que podrían interactuar de forma negativa.
otros
También es posible encontrar otro tipo de medicamentos antidepresivos, como por ejemplo, los tricíclicos o los atípicos.
¿La medicina de la depresión funciona para todos?
Lo cierto es que no todas las personas responden del mismo modo a los fármacos que usualmente son utilizados para tratar trastornos como la depresión o la ansiedad.
Es por ello que siempre es importantísimo estar en contacto con los profesionales que te los hayan recetado, para ir comentándoles los efectos que están teniendo los medicamentos, y si se está produciendo algún tipo de efecto adverso.
La depresión y las monoaminas
Las monoaminas son compuestos químicos que cuentan en su estructura con un único grupo amino. Dentro de las monoaminas podemos encontrar las:
- Catecolaminas: adrenalina, noradrenalina y dopamina.
- Indolaminas: serotonina.
- Otras: como, por ejemplo, la acetilcolina.