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Usos desconocidos del Omega 3: Depresión y otros padecimientos emocionales

Desde que los trastornos depresivos comenzaron a ser tomados más en cuenta por las personas del común y los expertos, han ido poco a poco surgiendo nuevas opciones de tratamiento, entre las que se incluye el uso de una larga lista de sustancias naturales, como el famoso Omega 3.

Este ácido graso, ya reconocido por sus diversas aplicaciones en la salud del cerebro, de los ojos y de todo el sistema cardiovascular, esconde en su interior un fascinante secreto y es que, en algunos casos, ha demostrado el poder a la hora de alterar el estado anímico de las personas.

Si no tienes muy en claro de qué te estoy hablando, en este post conocerás algunos aspectos fundamentales sobre el uso de Omega 3 en depresión, como qué es con exactitud este famoso elemento, que tan útil resulta en realidad, sus efectos en el cambio anímico y cómo se utiliza.

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Índice de contenidos📚:

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Omega 3 y trastornos depresivos: ¿Qué es en realidad este famoso ácido graso?

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Seguramente, en más de una oportunidad a lo largo de tu vida, has oído hablar sobre el Omega 3, ya que suele encontrarse frecuentemente en tratamientos multivitamínicos o ser recomendado por médicos por una larga lista de razones. Pero, aunque ya sepas muy bien que se trata de algo positivo para tu salud, es posible que aún no te hayas tomado el tiempo de averiguar qué es.

En sí, el conocido Omega 3, es la combinación de 3 diferentes ácidos grasos de tipo poliinsaturados considerados como esenciales para el correcto funcionamiento de tu organismo, los cuales se pueden encontrar principalmente en el aceite extraído de diferentes pescados como el famoso bacalao, o en ciertas semillas, como la chía, el lino y diversas oleaginosas.

Su ingesta es considerada un elemento esencial de la dieta diaria, ya que, a diferencia de otros elementos tan importantes como este, nuestro organismo no tiene la capacidad de generarlo o producirlo.

¿Qué tan efectivo es usar Omega 3 en depresión?

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Cada vez es más común escuchar comentarios sobre que el Omega 3 ayuda contra la depresión y, si estás empezando a considerar aumentar su consumo, esto es algo que podría serte de utilidad.

Y es que, a pesar de que los trastornos depresivos no son una razón para incluir un poco de Omega 3 en tu dieta diaria, ya que el mismo al estar asociado a diversos procesos esenciales, debe estar presente quieras o no, se considera que el aporte que este trae a la salud mental y anímica es motivo suficiente para tenerlo en cuenta como parte de un tratamiento que ayuda a luchas contra la depresión.

Está demostrado que el consumo prolongado de este ácido graso tanto por personas del común como por quienes están enfrentando situaciones depresivas o han sido diagnosticados con depresión clínica o de cualquier subtipo, brinda un efecto positivo bastante elevado tanto a nivel emocional como en el funcionamiento general del cerebro.

Pero hay que aclarar que, si bien su efectividad ha sido probada en varias oportunidades, hasta ahora no se puede considerar el uso de Omega 3 como parte de un tratamiento alternativo para erradicar la depresión, sino más bien como un aliado ocasional, que sirve de apoyo al método que elijas, ya que por su acción por sí sola no resulta suficiente.

Sus efectos en tu estado anímico: la mayor razón por la que el omega 3 y depresión emocional están tan relacionados

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Para entender del todo el motivo por el cual este ácido graso es tan recomendado para los pacientes que están enfrentando depresión, hay que tener en cuenta los efectos que esta sustancia natural genera sobre el estado anímico, ya que, al estar deprimido es justamente este aspecto de tu salud el que más se ve comprometido.

A modo general, hay que recordar que el Omega 3, ayuda al desarrollo del cerebro, así como a regenerar las funciones que se han visto afectadas por cualquier motivo, incluso las asociadas al estado emocional y, por ende, a la aparición de la depresión.

Pero, en sí, la verdadera efectividad de la relación entre omega 3 y trastornos depresivos, se debe a la propia naturaleza de la enfermedad, y es que el trastorno depresivo es un tipo de patología infamatoria que genera cierto grado de daño oxidativo, el cual puede ser contrarrestado con la ingesta de Omega 3.

Gracias a ello, tienes una actitud más alegre y logras sobrellevar con más energía las dificultades que surgen en tu día a día.

Si el Omega 3 ayuda contra la depresión, ¿qué debes hacer para consumirlo?

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Como sabes, este tipo de Omega es un aceite que no se puede producir de forma natural por los humanos, sino que debemos adquirir de fuentes externas, como la alimentación. Pero el consumo promedio que se mantiene en una dieta genérica no es suficiente para lograr las metas deseadas en cuanto a la lucha contra la depresión. Por ello, para lograrlo, es necesario tener en cuenta ciertos elementos.

No todos los omegas son iguales

El primer punto para entender la ingesta apropiada, es considerar el origen del producto. Si bien puedes obtenerlo tanto de fuentes vegetales como animales, a nivel nutricional estos aceites no son nada parecidos.

Para atacar la depresión, lo ideal es centrar tu atención en productos que contengan una mayor concentración de EPA y no de DHA. Dicho en otras palabras, tener como opción preferida los suplementos empacados en los que puedes analizar la composición, o los pescados y productos marinos si lo tuyo es la opción más natural.

La cantidad que hay que consumir

Sumado a lo anterior, en la relación entre Omega 3 y depresión emocional es necesario aclarar la cantidad, debido a que, como en todo, se necesita un porcentaje mínimo para lograr los efectos deseados.

Según la American Psychiatric Association (APA), la cantidad de Omega 3 recomendada para personas que enfrentan cuadros depresivos es una dosis de 1000 mg al día, la cual debería tener una concentración mínima de 60% de EPA para lograr notar cierto nivel de resultados.

Ahora que ya tienes la información, ¡utilízala para cuidar tu salud!