4 cosas que debes saber sobre ataques de pánico: qué es, síntomas, causas y cómo tratarlo
En el mundo, existen algunas dolencias y trastornos de los que se escucha hablar con más frecuencia que otros, ya que, en general, llegan a afectar a una cantidad de personas mucho mayor y se presentan con un índice de aparición cada vez más alto, algo que, de cierta manera, preocupa a los expertos.
Uno de ellos, del que seguramente has oído, es el trastorno conocido como ataques de pánico, un problema persistente del que se habla mucho, pero del cual, lamentablemente, mucha de la información que se comparte no es del todo fiable, ya que es normal que sea confundido con otras dolencias.
Si has llegado hasta este tema, es porque te interesa saber un poco más sobre el ataque de pánico, por lo que, para ayudarte en este objetivo, a continuación, te estaré explicando 4 aspectos claves que debes conocer, incluyendo qué son en realidad, cuáles síntomas presenta, sus causas, y si es posible o no tratarlos.
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Índice de contenidos📚:
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¿A qué se conoce como trastorno de pánico?
Para poder entender en profundidad este conocido trastorno que afecta a una enorme cantidad de personas en el mundo, lo primero que hay que hacer es comprender su concepto general. Y es que, como te expliqué más arriba, el ataque de pánico es un tipo de trastorno un poco incomprendido, el cual con mucha frecuencia se le confunde y compara con otros similares, como la ansiedad e incluso la depresión.
Para los expertos, el trastorno de ansiedad ataque de pánico es un episodio momentáneo en el que se siente un alto nivel de ansiedad o incluso miedos repentinos que no parecen estar relacionados a nada que esté ocurriendo en el momento, por lo que se toma como una conducta más emocional y psicológica que una reacción de defensa.
En las crisis de pánico, este miedo jamás llega solo, sino que se ve acompañado de diversos y variados síntomas físicos que ayudan a aumentar la presión y son los responsables de la característica más resaltante del ataque de pánico, el hecho de que suelen durar unos pocos minutos como máximo.
En él, se tiene la incómoda sensación de que algo malo está ocurriendo o va a pasar en cualquier instante, lo que lleva a activar una larga lista de señales de alarma en el organismo, haciendo que tengas la reconocida sensación que se describe más arriba.
Principales síntomas de los ataques de pánico
Para identificar de forma correcta un trastorno de pánico en el momento en el cual comienza a ocurrir, es indispensable que conozcas y entiendas los principales síntomas que lo acompañan, ya que, en general, cada crisis es algo diferente y puede expresarse de distintas formas, aunque siempre incluyendo al menos dos o tres de los signos más comunes.
Lo primero que hay que explicar, es que, a diferencia de otras crisis de nervios, un ataque de pánico no comienza lentamente, sino que se presenta de manera súbita y sin previo aviso, sin relacionarse a un momento o sentimiento específico que puedas prevenir. O sea, que sin más, puedes estar teniendo un ataque inesperado, ya sea de día noche, en tu casa o mientras te diviertes.
Como te indicamos, hay una gran variedad, y suelen ser muy diferentes tanto entre individuos como en los propios episodios de una sola persona. Pero, hasta ahora, se han logrado identificar de forma precisa diversos síntomas y signos de alarma que suelen relacionarse, entre los que se encuentran los siguientes:
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Síntomas psicológicos o emocionales
Este grupo abarca las sensaciones que experimentas durante y después de la crisis. De todos los signos propios del trastorno, son los más fijos, ya que, al no haber tantos, tienen menos probabilidad de variar entre cada episodio.
Estos, incluyen durante el episodio principalmente:
- Pánico
- Nerviosismo
- Ansiedad
- Frustración
- Sensación de peligro
- Miedo a la muerte
Y después de superada la crisis:
- Pena
- Ganas de estar solo
- Sensación de desespero
- Miedo generalizado
Síntomas físicos y de salud
Además de los mencionados más arriba, como sabes, el ataque de pánico tiene otros síntomas más físicos, los cuales siempre llegan junto con los anteriores, aunque, en este caso, sí varían muchísimo más. Entre ellos, se encuentran los siguientes:
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- Sensación de hormigueo
- Dolores de cabeza
- Nauseas
- Vómitos
- Malestar estomacal
- Dificultad para respirar
- Sudoración excesiva
- Taquicardia
- Dolor en el pecho
- Falta de aire
- Sensación de que no se puede respirar
- Escalofríos
- Sacudidas y temblores
- Desmayos
- Fatiga
- Cansancio
¿Qué puede causar el trastorno de ansiedad ataque de pánico?
Aunque sea un trastorno sumamente frecuente, hasta el momento, los expertos no han logrado llegar a una conclusión única sobre las causas que pueden generar que una persona tenga, ya sea un ataque de pánico aislado, o que comience a sufrir de este trastorno de manera frecuente.
Pero, a pesar de que no existe una versión totalmente unificada, si hay diversos estudios que han comprobado toda una lista de detonantes que pueden afectar a cualquier tipo de persona, independientemente de su edad, género o estilo de vida.
Y es que, el cuerpo humano, aunque parezca un poco impredecible, suele actuar muchas veces de maneras que se pueden estudiar y analizar. En general, este problema aparece como una respuesta de tu cuerpo a ciertos impulsos, cuando, por alguna razón, tu mente crea una sensación de peligro inminente que da a entender al cuerpo que hay que comenzar a actuar.
Esta sensación, genera que tu mente comience a expulsar sustancias de alerta, como la dopamina y adrenalina, las cuales disminuyen ciertas funciones del cuerpo y aumentan otras, un efecto que se asocia a la respuesta de lucha y de huida. Lo que normalmente te termina generando los síntomas que se han mencionado más arriba.
Este efecto, se genera entre otras, por las siguientes causas:
- Problemas psicológicos
- Depresión
- Ansiedad
- Problemas o deficiencias cardiacas
- Hiper o hipotiroidismo
- Abuso de sustancias
- Exceso de alcohol
- Consumo de algunos medicamentos que alteran las emociones
- Exceso de estrés
- Tabaquismo o consumo de nicotina
- Presencia de traumas
- Distintas fobias
Sumado a ellos, existe una enorme cantidad de causas, ya que, este trastorno, se puede generar incluso como consecuencia de una crisis mayor, por ejemplo, después de haber superado una experiencia traumática o tras la pérdida de un ser querido, por lo que, en general, debes estar alerta y, cuando comiences a presenciar cualquier síntoma, no descartes la posibilidad de que, en realidad, puedas estar padeciendo de trastorno de ansiedad y crisis de pánico.
¿Cómo se puede atender el trastorno de ansiedad y crisis de pánico cuando llega?
Cuando comienzas a padecer, o presentas este problema de manera frecuente, es importante que lo atiendas siempre de manera correcta, ya que, solo así podrás lidiar con el conflicto interno que genera y reducir la probabilidad de desarrollar efectos secundarios a corto o largo plazo.
La atención que se le da a los ataques de pánico va a depender de qué quieres lograr con ellos, y el momento en el que busques solución. Y es que, no es lo mismo atender el problema mientras se genera para buscar reducir su impacto o incluso acortar el tiempo que buscar una solución real que disminuya la frecuencia con la que los presentas.
Para que lo entiendas mejor, en cada caso se puede dedicar una explicación breve, que puedes ver como una guía de acción o simple consejo.
Cómo atender una crisis de pánico mientras ocurre
Al ser un ataque que no dura más que unos cuantos minutos, lamentablemente no hay demasiadas cosas que hacer. Muchos expertos recomiendan que, por más fuerte que sea la sensación y ganas tengas de buscar ayuda, evites llevar el asunto a mayores, y simplemente esperes a que pase solo.
Pero si, realmente quieres hacer algo para reducir el impacto, hay ciertos cambios que pueden ayudar más de lo crees.
Lo más efectivo es que, cuando estés en medio de un trastorno de ansiedad y crisis de pánico y empieces a sentir que todo va a colapsar, procura mantenerte lo más calmado que puedas, por muy difícil que pueda parecer. Ten siempre presente que, aunque tengas dolores, malestar o demás, tu vida en realidad no está en riesgo, sino que las emociones van a liberarse dentro de poco.
Para lograrlo, puedes recurrir a varias técnicas, como la respiración controlada, meditación, o el simple hecho de buscar centrar tu atención en cualquier otra actividad, cosas que, aunque parezcan simples, son de gran ayuda.
Cómo tratar el trastorno de pánico después de superada la crisis
Si has comenzado a notar que el pánico está empezando a controlar tu vida y se presenta cada vez más a menudo, por más que quieras evitarlo, debes saber que este problema jamás va a desaparecer por sí solo, por lo que, llegado a un punto, será necesario comenzar a considerar buscar algo de ayuda extra que trate el asunto de raíz.
Una excelente opción para lograrlo en poco tiempo, es acudiendo al reenfoque esencial, que brinda las herramientas necesarias para lidiar con los ataques de pánico sin importar si están o no ligadas a problemas de salud o trastornos de ansiedad, gestionando el problema desde su raíz, para que deje de afectar tu vida.
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