Las Emociones y el Hígado: La sorprendente forma que puede afectar uno al otro
El hígado es uno de los órganos principales del cuerpo, este desempeña tres funciones consideradas esenciales: se encarga de desintoxicar, almacena energía y apoya en la síntesis de nutrientes.
Pero, a pesar de su gran impacto en nuestra salud física, el hígado y las emociones están más relacionadas de lo que puedes llegar a considerar. Ya que, aunque muchos no lo crean, la salud de este órgano se puede ver afectada por el estado de ánimo que estés viviendo.
En la actualidad, se cree que el cuerpo humano pude responder a los impulsos emocionales y llevarlo hasta un estado más físico, por lo que, para que alcances una buena salud, en este tema te hablaré sobre los sentimientos e hígado, cómo están relacionados, si debes o no reprimirlo y de qué manera puedes mantener un buen nivel emocional.🙂
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Índice de contenidos📚:
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Sentimientos e hígado ¿cómo se relacionan?
Como sabes, una de las funciones más importantes del hígado es el regular y controlar la circulación sanguínea a lo largo del cuerpo. Pero, para sorpresa de muchos, este aspecto no sólo influye en la salud física.
Se ha demostrado que, el mantener una correcta circulación de la sangre, ayuda a regular el estado anímico y puede influir de manera bastante directa en la aparición de ciertas emociones tanto positivas como negativas.
Para saber qué representa el hígado a nivel emocional, hay que tener en cuenta que este órgano tan relevante está más relacionado con emociones como la ira, frustración, odio y similares. Y se reconoce mediante ciertos síntomas.
Principales síntomas
Determinar por qué se enferma el hígado y poder actuar de la mejor forma, si está comenzando a afectar tus sentimientos, es más fácil de lo que crees, solo debes tener presente ciertos signos de alarma.
Si presentas alguno de los que te mencionaré a continuación, te recomiendo que consultes a tu médico de cabecera, quien te ayudará a definir si se trata o no de un problema en tu hígado:
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- Problemas al momento de asimilar tus alimentos
- Falta de apetito
- Acumulación o presencia excesiva de gases
- Ganas de vomitar y mareos
- Dolor de cabeza frecuente tras comer
- Tonalidad amarilla en la piel
- Hinchazón en el abdomen bajo
- Caspa, caída del cabello o sarpullido
- Migraña
- Dificultad para conciliar el sueño
- Estreñimiento
- Edema
- Fatiga en los músculos, mala circulación o calambres
¿Cómo evitar los efectos negativos de la relación emociones – hígado?
Para mantener un sistema integral totalmente saludable, lo más conveniente es comenzar a gestionar de manera correcta los sentimientos, principalmente los considerados “malos”, ya que son los que poseen un mayor impacto en el hígado y las emociones.
Para lograrlo, puedes hacer varias cosas, pero, lo más importante, es que, si sientes que requieres un extra de ayuda, busques ayuda y comiences un tratamiento relacionado a la salud emocional. Seguramente, después de un tiempo, comenzarás a notar cambios positivos en tu capacidad de comprender y regular el estado anímico.
Además, si gustas y tu médico está de acuerdo, puedes complementarlo con los consejos que te detallamos a continuación.
¿Cómo debes actuar?
- Comienza por darte cuenta
El paso inicial para evitar llegar al extremo de dañar tus sentimientos e hígado a la vez, es darte cuenta que algo está ocurriendo. Si sabes que las emociones malas afectan a tu hígado, has lo posible por evitarlas, detecta qué te altera y te hace enojar e intenta gestionar tu ira de la mejor forma posible.
- Busca cómo comunicar lo que sientes
Si quieres evitar reprimir lo que sientes debes, de manera obligatoria, aprender a comunicarlo de forma clara y directa. Un consejo, es intentar expresarte de forma serena y haciendo lo posible por evitar dañar a otros con tus palabras. Es posible que al comienzo se te haga un poco difícil, pero con la práctica seguro lo harás mucho mejor.
¿Cómo mantener estables las emociones del hígado?
Ya puede que tengas bastante claro por qué se enferma el hígado emocionalmente, pero debes tener presente que, para cuidarlo de manera efectiva, es importante que hagas lo posible por mantener los sobresaltos emocionales fuera. Para ello, te explicamos algunas maneras de gestionar tus emociones negativas desde casa.
Sé sincero
Las emociones negativas se dan porque no eres capaz de decir lo que sientes cuando lo sientes. Por lo que, si sabes qué significa el hígado espiritualmente y como este aspecto se relaciona con tu estado anímico, debes tener claro que provocan consecuencias negativas.
Para que esto no pase, busca reflexionar, calmarte y tomarte el tiempo de expresar sin miedo lo que sientes a alguien de confianza (sea en el momento que estás experimentando la sensación negativa o después que hayas logrado la calma). Este tipo de sinceridad, aunque parezca sencilla, da un alivio a la tensión y evita que las emociones se vayan acumulando.
Presta más atención a tu entorno
Si estás en un ambiente pesado, tu cuerpo lo va a sentir y, a corto plazo, tu estado de ánimo se tornará cada vez más parecido al del lugar. Por ello, siempre busca reducir al mínimo tu presencia en sitios con mala energía.
Comienza a practicar yoga
Una excelente manera de relajarte y evitar la tensión y emociones fuertes que puedan llevarte a desarrollar un problema mayor, es el practicar yoga. Esta disciplina está pensada para reducir el estrés, un punto clave en la relación emociones – hígado.
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Modifica tu lenguaje
Otro aspecto clave en este punto es la manera en la que expresas tus problemas. Debes tener claro que, no es lo mismo decir que estás cargado de dificultades a mencionar frases como “la vida me ha puesto retos que voy a superar”. Esto, aunque parezca algo simple, tiene un impacto positivo en la autoestima y, por ende, en la percepción emocional y su impacto en el hígado.
Prueba la acupuntura
Si eres lo suficientemente atrevido, puedes poner en práctica la famosa acupuntura, una ayuda extra que te hará sentir mejor y estabilizar las emociones del hígado. Solo debes tener presente que esta técnica, aunque ha demostrado efectividad, conviene más como algo alterno y no como tratamiento principal.
Reflexión final
Si aprendes a mantener una comunicación adecuada y das mayor prioridad a tu salud emocional, no solo estarás teniendo un impacto positivo en tu estado de ánimo y la forma en la que te relacionas con otros, sino también en la salud de tu organismo.
El hígado y las emociones están muy relacionadas, y este es un aspecto que debes tener presente en cada momento, por lo que debes darte el tiempo de actuar siempre de la manera más oportuna y permitirte buscar ayuda cuando lo requieras.😉
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