emosiones-reprimidas

Emociones reprimidas: cómo canalizarlas para sentirte bien

Guardarse las emociones no es la solución para que se vayan, como muchos creen. ¿Alguna vez te preguntaste cuántas veces al día sientes emociones reprimidas?

El dejar dentro todo este sentir puede ser muy contraproducente, debido a que, lejos de borrarlo, queda dentro nuestro de forma inconsciente, con ganas de estallar en cualquier momento.

Quédate en este post, donde te hablaremos en profundidad sobre los estados emocionales reprimidos, cómo identificarlas, las consecuencias de expresarlas y cómo tratarlas. 🧐

***

Índice de contenidos:📚

***

Reprimir sentimientos: ¿Cuál es el motivo?

esconder-emosiones

Somos una especie racional, estamos educados para pensar y luego actuar de acuerdo a ello y esto, a veces, genera que dejemos a un lado las emociones, que no le demos la relevancia que merecen. Socialmente, las emociones fueron clasificadas cada una con sus nombres y con sus tipos, ya sea positivas (felicidad, diversión, gratitud) o negativas (tristeza, temor, enojo).

Con el paso de los años, estuvimos bajo estas visiones, y bajo este modelo. Referirse al tema no era algo normal, lo mejor era reprimir emociones, actuar como si no estuvieran allí, esconderlas o tranquilizar el sentimiento como sea, para que nadie lo note.

Frases tales como “no temas”, “no llores”, “sé fuerte”, son muy comunes de escuchar. Seguramente hasta la hayas utilizado en algún momento de tu vida.

Uno de los motivos que genera como consecuencia padecer sentimientos reprimidos son todas estas creencias en cuanto a los sentimientos que constantemente consumimos en esta sociedad.

Otros ejemplos de este tipo son: “no exageres”, “no estés triste”, “no seas miedoso”, “la vida es corta, sonríe”, “arriba, hay personas que están mucho peor”, “tranquilízate, en serio”, “no te enojes, no pasa nada”.

Consecuencias de reprimir emociones

liberar-emosiones

Las emociones reprimidas, en muchas ocasiones, llegan a apagar los buenos momentos de la vida. Cuando no se libera lo que tenemos dentro, el temor y la sensación de soledad aparecen, debido a que los sentimientos que no se comparten generalmente se hacen más grandes. Posterior a esto, empiezan a aparecer síntomas dañinos para la salud, como lo son las enfermedades físicas o psíquicas como la neurosis, provocando un malestar a nosotros mismos y también a las personas que nos rodean.

Hay muchos estados emociones que todos clasificamos como incómodas o malas, como lo es la pena, el temor, el enojo, etc., que en ocasiones tratamos de ocultarlas, actuando como si no estuviesen allí, dejándolas a un lado y, en el caso que se pueda, hasta intentar no sentirlas.

Lo cierto es que, para reprimir sentimientos se precisa de una enorme cantidad de energía, porque genera un desgaste notorio, tanto físico como mental. Más allá de que una y otra vez intentemos reprimirlas, nunca lograremos nuestro cometido, ya que se manifestarán de otra manera (generando insomnio, dolores musculares, entre otros).

¿Cómo distinguir los sentimientos reprimidos?

reprimimos-emosiones

Existen varias formas de saber si tienes sentimientos reprimidas, debido a ciertos cambios en tu vida cotidiana. Algunos de ellos son:

  • Te sientes desganado, tu ánimo está por el piso.
  • Apagas tus emociones, como si de repente dejaras de sentir.
  • Estallas muy fácilmente, estás muy susceptible a todo e irritable.
  • No puedes dormir y, si lo logras, te despiertas varias veces en la noche.
  • Vives estresado y estás pendiente de tenerlo todo bajo control.
  • Presentas dolores y tensiones musculares.

Todo sucede porque, al reprimir emociones, en vez de sentirlas y expresarlas las estamos direccionando hacia adentro, entonces, toda esa energía la termina sufriendo nuestro cuerpo y la manifiesta con la aparición de diversos malestares.

Es importante saber que la energía no se elimina, se transforma. Por ello, si tratamos de ocultar una emoción (que es una energía en estado puro) puede transformarse en algo dañino, algo que intenta somatizar nuestra emoción, como lo son las enfermedades.

¿Qué tipo de emociones reprimidas existen?

reprimir-emosiones

Cualquier emoción que se nos presente es necesario exteriorizarla para favorecer nuestro bienestar. Todas se necesitan, pero suele ocurrir que algunas de ellas están catalogadas como negativas, no solamente por alterarnos, sino porque socialmente se las han etiquetado con cierto valor moral que generan la desaprobación de las personas.

Algunos tipos de emociones reprimidas son:

  • Temor
  • Enojo
  • Tristeza
  • Ira
  • Culpa
  • Celos

El convivir en esta sociedad ha sido muy perjudicial: guardarse el enojo o la ira, por ejemplo, generó con frecuencia estallidos violentos irracionales. En cambio, otras emociones catalogadas como positivas, como lo son la calma y la alegría, generaron una idealización en torno a ellas promoviendo a transformarse en las únicas necesarias para nuestro bienestar, sin dudas, una expectativa que tiene muy poco de realidad.

Dejar que las emociones reprimidas fluyan

reprimir-sentimients

Uno de los puntos más importantes para saber manejar las emociones es, en vez de guardarlas e ignorar que están allí, dejar que fluyan. Esto no significa que si, por ejemplo, estás enojado con tu hermano soluciones todo a los golpes. Fluir es que le prestes atención a esa emoción, que no la hagas a un lado, porque quizás quiere transmitirte algo. Hay que tener conciencia de cada una de las emociones que tenemos y atenderlas para entendernos también a nosotros mismos.

Una excelente manera de comenzar

  • Hacer un reconocimiento de la sensación corporal que estamos viviendo.
  • Permitirnos sentir esa sensación (por ejemplo, temblores).
  • Ya identificada la sensación, estudiar qué emoción puede haber tras ella.
  • Una vez tenemos la denominación de esa emoción listo, la dejamos que fluya, sin juzgarla ni negarla.
  • Si no encontramos cómo se llama la emoción no hay problema, igualmente dejamos que se manifieste libremente.
  • Una vez que ya podemos convivir con la emoción, no hay que engancharse demasiado a ella y dejar que pase para que no se vuelva una carga emocional excesiva.

A través de las sensaciones, nuestro cuerpo nos va mostrando qué emociones estamos viviendo. Es importante saber también que cada persona es diferente, por lo que cierta sensación puede estar vinculada con una emoción distinta.

Atender a cada una de las emociones que sentimos, en el momento que aparecen, hará que nos entendamos mejor a nosotros mismos, a nuestro cuerpo y mente, además de poder gestionarlas para que no resulten perjudiciales para nuestra vida cotidiana. Dejarlas fluir, para que se regulen por sí solas.

Entonces, queda en claro que las estados emocionales reprimidos no hacen más que empeorar las cosas. Cuanto más te guardes lo que sientes, más complicado será sobrellevar el día a día. Por ello, no esperes más y empieza a amigarte con tus emociones, a entenderlas y así favorecerás tu bienestar y salud. ¡Puedes hacerlo!

🛑 Más artículos de la categoría «Las emociones» 😀⤵️: